La meditación debería estar en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y debería ser uno de los primeros.

Lo afirmo así, sin vueltas, pues en mi opinión una cosa es un ser humano que vive en automático, en función de todos los objetivos culturales y racionales, y otra cosa muy diferente es un ser que a través de la meditación ha visto sus mecanismos de pensamiento-emociones y ha llegado a conocer su esencia. Lamento estropearles aquí la sorpresa al contarles que aquello que somos no tiene relación ni con los pensamientos ni con las emociones. Sin embargo, nos hemos pasado décadas en pos de nuestros pensamientos y emociones, ¿verdad?

Así es y es por eso que les deseo lo que escribí en la imagen. Que la curiosidad pueda más que lo que te ha hecho procrastinar la indagación de ti mismo.

Hay muchas disciplinas que te ayudan en el autoconocimiento pero está fuera de discusión que la reina de las herramientas para el autoconocimiento es la meditación.

Pero no la meditación al azar, sin guía. Poner meditaciones guiadas tomadas al azar antes de irte a dormir no es meditar. No te sirve más que para relajarte un poco.

De corazón te sugiero que no pierdas tiempo y que busques un método y una guía para meditar.

Te ofrezco lo que yo he aprendido y que tanto bien me hace a mí y a quienes lo usan. Puedes encontrar otros, pero que haya un método y que tú lo sigas, practicándolo al menos un poco cada día. Es de esas rutinas que te devuelven mucho más de lo que esperabas cuando las iniciaste.

Los próximos grupos del taller de Introducción a la Meditación empiezan el 7 de agosto (10 am) y el 12 de agosto (19:30h).

Abrazos,
Patricia

Hoy es 5/8/2024.